El apartamento se llenó de suspiros y gemidos intensos mientras la madre de su amiga experimentaba el placer.
El apartamento se llenó de suspiros y gemidos intensos mientras la madre de su amiga experimentaba el placer.
La madrastra de su amiga estaba tan apretada que cuando él la penetró, ella lo sintió hasta en los huesos, suspirando con alivio al tenerlo adentro.